ESTONIA Y EL ARTE DE DIGITALIZAR PROCESOS

Escrito por Comunicaciones EVoting / 07 de Agosto del 2023

¿Imaginas un país donde puedas realizar el 99% de los trámites online? Esto implicaría ahorrarte filas y esperas presenciales para papeleos que en la mayoría de los países requerirían mucho tiempo. En Estonia esto es una realidad y es un ejemplo para el resto del mundo.

Desde la década de 1990, Estonia ha avanzado en la digitalización de procesos, logrando hasta la fecha que sus ciudadanos puedan realizar el 99% de los trámites en línea, pero ¿a qué se debe este logro?

Comencemos desde un principio. Al recuperar su independencia de la Unión Soviética, Estonia tuvo que rearmarse y crear un nuevo país desde cero. Esto coincidió con el creciente desarrollo de las computadoras y aquí fue donde se vio una oportunidad de avanzar a la innovación.

El Gobierno apostó por una digitalización temprana pensando en la economización de los recursos, teniendo en cuenta que, a largo plazo, realizar todo en papel sería más costoso que hacerlo en línea. En 1993, los ciudadanos recibieron sus Números de Identidad, que serían la base para el desarrollo posterior.

Ya el 2001 surge la verdadera revolución, cuando se implementa la Identificación Digital (eID) y X-Road, que resultan vital para el desarrollo posterior.

El eID sirve para validar ante el estado o un privado que tú eres quien dices ser. Además, permite firmar documentos en línea y es igual de válido que firmarlos en papel, básicamente funciona como una cédula de identidad digital.

X-Road es una infraestructura de datos, donde el sector privado con el público pueden intercambiar datos de manera segura y transparente. Esta capa de intercambio proporciona una interoperabilidad que permite un estándar unificado.

Un ejemplo básico: en la mayoría de los países del mundo, las distintas oficinas de gobierno tienen diferentes sistemas de información y no se conectan entre ellas. Los datos no se pasan de un organismo a otro. Esto provoca que, cada vez que un ciudadano quiera hacer un trámite, deba reiterar sus datos en los distintos sitios.

Con X-Road este proceso se simplifica. La información que proporcionas, ya sea a un ente privado o público, queda almacenada aquí y ya no lo vuelven a pedir. Esto funciona bajo la política de “Once Only”, la que dicta que si tú ya diste una parte de tu información personal al gobierno, no debes repetirla porque ya la tienen.

Con esto, se pudo digitalizar los registros de salud, mejorar el sistema de impuestos, agilizar los trámites diarios e incluso se estima que el país ahorra el 2% del producto interno bruto anualmente.

¿Es aplicable esto para otros países?

El ex Asesor Digital Nacional de Estonia, Marten Kaevats, menciona que la dificultad de extrapolar esta forma de vida a otros países no radica en lo técnico, sino más bien en lo cultural.

Él propone que los ciudadanos aún miran con recelo la digitalización casi total y que, en medida que la confianza de la sociedad se consolide en estos mecanismos, el proceso será más llevadero y simple de aplicar.

“No tiene nada que ver con lo tecnológico, tiene todo que ver con la mentalidad de las personas y la cultura. En términos tecnológicos, este cambio es muy rápido, pero desde la perspectiva cultural tarda tiempo”, relata Kaevats.

En conclusión, el ex Asesor Digital Nacional de Estonia mantiene que el cambio es posible y es fundamental hacerlo, pero que implica una transformación cultural y social, donde se acepte la digitalización como un mecanismo seguro y transparente.